jueves, septiembre 14, 2006

The drug I need

I used to think that what wasn’t in internet, it didn’t exist. Well, every rule has an exception. Daughtry, again. I love this song. I really do. However, I haven’t found the lyrics in internet. Amazing. Incredible. So, I’m going to break this exception, in order to confirm the rule. The lyrics will be in internet. Here. Now.
Since English is not my first language, I haven’t fully understood the song. I did my best, though. So, if anybody can help me to improve this text, it will be really great. Quotation marks mean I didn’t understand the sentence or it doesn’t make sense to me.

The drug I need
I'm burning the letters you wrote to me
If I did I will not forget (?)
I'm saying goodbye in my own way
And turning that love into a hate
Sometimes it comes when let it go (?)
And wanting something you can’t ever hold (?)

Forgive me; I'm forgiving you (?)
But we both know that
You can't really truly hate something you never know

I hate the way you bring me down
I hate the things you said to me
I hate the way you make feel today
But you're the drug I need

I'm tired of trying
To put a smile on your face
You just keep on reaching
But some things never change

The sadness I feel with knowing you
The hardest it comes with the things you do
I guess I'm just a fool
All I have is my hate now
You want to take that too

I hate the way you bring me down
I hate the things you said to me
I hate the way you make feel today
But you're the drug I need

I'm dreaming of yesterday
When your smile was everywhere
And maybe I'm saving the best from me
For someone who really cares
Someone writing (?) some works today
To help me find my way
And maybe you never understand
But my hate is all I really have today

I hate the way you bring me down
I hate the things you said to me
I hate the way you make feel today
But you're the drug I need.

Chris, baby, I love you.

martes, septiembre 12, 2006

La Naúsea, mejor conocida como la malpa

Iba a escribir solo:
"Nada. He existido."
Pero, la verdad, es que también quería transcribir un fragmento -que finalmente no encontré y no sé imaginé que lo había leído- con el que me identifico en este momento: en hechos, no ha pasado nada; sin embargo, dentro de mí todo ha sido una vorágine de pensamientos, sensaciones y sentimientos que no se dejan contar. Ya escuché Natural Born Killers y Sepultura. Ahora llegué al silencio. Intento moverme solo lo estrictamente necesario, para ver si lo demás se aquieta también.

Me dio durísimo cuando leí "La Naúsea" y, sin embargo, creo que es con el espíritu de este momento que hubiera podido "disfrutarla"´más. Estoy intentando encontrarla en francés, pero no se deja.

Los acontecimientos de orden público de los últimos días han contribuido además a acentuar ese cansancio, ese deseo de decir -en palabras de Mafalda-: "Paren el mundo, me quiero bajar". Ni ganas de protestar hay ya. Diría que el involucramiento de miembros de la fuerza pública en los atentados ocurridos en Bogotá días antes de la segunda posesión de Uribe es ya demasiado. Y, sin embargo, también fue demasiado lo de Jamundí. Y es demasiado lo de las fosas comunes de las autodefensas y el perdón que se les está dando. Y los 3000 secuestrados sin acuerdo humanitario. Y fue en su momento demasiado el asesinato de tres candidatos a la presidencia. Y el Palacio de Justicia. Y la muerte de Gaitán. Y han sido demasiado tantas cosas, que, sin embargo, no han dejado mella para impedir que otras sigan sucediendo, que ya hasta el asombro está cansado.

Ahora ya no causa ninguna reacción que alguien como Darío Arizmendi pida a voz en cuello, sin consideración alguna del comportamiento periodístico, la pena de muerte para los militares de los atentados mencionados. ¡La pena de muerte, por favor! ¡Ya estamos a punto de querer legalizar la pena de muerte! ¡De que alguien que maneja opinión pública pida la pena de muerte! Eso solo me indica que ya hace mucho tiempo rebasamos los límites de la razón y la civilidad.

... no puedo evitar seguir recordando al huevo de la serpiente...